Limpieza de paneles solares durante el mantenimiento placas solares

Mantenimiento de placas solares: tipos, frecuencia y consejos prácticos

El mantenimiento de placas solares es una parte fundamental para garantizar la eficiencia, seguridad y durabilidad de cualquier instalación fotovoltaica. Aunque los sistemas solares tienen una vida útil de más de 25 años y su funcionamiento diario es silencioso y estable, no son completamente libres de mantenimiento. De hecho, un buen cuidado puede aumentar la producción anual de energía y alargar significativamente la vida útil.

En este artículo repasaremos los aspectos clave del mantenimiento de placas solares: qué tipos existen, con qué frecuencia deben realizarse y qué elementos conviene revisar en cada caso. También hablaremos de cómo un plan de mantenimiento periódico puede ayudarte a prevenir incidencias y asegurar el máximo rendimiento de tu instalación.

Tipos de mantenimiento de placas solares

El mantenimiento de una instalación solar se puede clasificar en dos grandes categorías:

  • Mantenimiento preventivo: Acciones planificadas y periódicas para evitar fallos y mantener el sistema en condiciones óptimas.
  • Mantenimiento correctivo: Intervenciones puntuales para corregir fallos, averías o pérdidas de eficiencia detectadas.

Ambos tipos son necesarios para garantizar el rendimiento continuo y seguro de la instalación.

Mantenimiento preventivo de una instalación fotovoltaica

El mantenimiento preventivo permite anticiparse a los problemas antes de que ocurran. Esto no solo ayuda a evitar paradas en la producción, sino que también prolonga la vida útil de los componentes principales del sistema.

Conexiones y cableado

Las conexiones eléctricas y el cableado de corriente continua y alterna deben inspeccionarse anualmente para verificar:

  • Ausencia de conexiones sueltas o sulfatadas.
  • Integridad de los terminales y empalmes.
  • Ausencia de sobrecalentamiento o desgaste del aislamiento.
  • Correcto anclaje de los cables a la estructura y ausencia de nidos o mordeduras de animales.

Un fallo en las conexiones puede derivar en una caída significativa de la producción o incluso en incendios por efecto Joule.

 

Placas solares

Los paneles solares están expuestos a condiciones meteorológicas durante todo el año. Es fundamental:

  • Realizar una limpieza periódica (1 a 3 veces al año).
  • No emplear productos abrasivos ni chorros a presión que puedan dañar el vidrio.
  • Revisar si hay sombreados, microfisuras, delaminaciones o puntos calientes.

La suciedad puede reducir la producción hasta un 15-20% si no se limpia regularmente.

Estructura de las placas solares

La estructura que soporta los paneles también necesita ser revisada, especialmente en instalaciones en tejado o zonas con fuerte viento. El mantenimiento incluye:

  • Verificación de anclajes y fijaciones.
  • Comprobación de posibles oxidaciones, corrosión o deformaciones.
  • Asegurar que no hay desplazamientos por dilataciones térmicas.

Una estructura inestable puede comprometer la seguridad de la instalación y de las personas.

Baterías solares

En instalaciones aisladas o sistemas de autoconsumo con baterías, estas requieren una atención específica. La revisión de las baterías incluye:

  • Control de la temperatura y ventilación del recinto.
  • Verificación del estado de carga (SOC) y la profundidad de descarga (DoD).
  • Inspección visual del estado de los bornes, celdas y carcasa.

Baterías de litio

Las baterías de litio requieren menos mantenimiento que las de plomo, pero es importante:

  • Monitorizar el BMS (sistema de gestión de baterías).
  • Comprobar que no haya errores de comunicación o picos de temperatura.
  • Confirmar el correcto funcionamiento del inversor y su comunicación con la batería.

Baterías de plomo (opcional si aplica)

  • Comprobación del nivel de electrolito (si son abiertas).
  • Igualación de celdas periódicamente.
  • Limpieza de terminales y control de sulfatación.

Inversores y reguladores de carga

El inversor es el corazón electrónico de la instalación, encargado de transformar la corriente continua en alterna. Las tareas de mantenimiento incluyen:

  • Limpieza de filtros de ventilación (si los tiene).
  • Revisión de errores o alertas en pantalla o software.
  • Verificación de producción diaria y rendimiento.
  • Comprobación de la conexión con la red y actualización de firmware si aplica.

Un fallo en el inversor puede parar completamente la generación solar.

Mantenimiento correctivo de una instalación fotovoltaica

Este tipo de mantenimiento se realiza cuando se detectan fallos inesperados. Algunos ejemplos comunes son:

  • Reposición de paneles rotos por granizo o impactos.
  • Sustitución de fusibles o disyuntores defectuosos.
  • Reparación de inversores o componentes electrónicos.
  • Reajuste del sistema antivertido o protecciones de red.

Para que sea eficaz, es fundamental contar con monitorización en tiempo real que detecte las caídas de producción o desconexiones automáticamente.

Garantía del mantenimiento de una instalación fotovoltaica

Las garantías de los fabricantes y de las empresas instaladoras están sujetas, en muchos casos, a que el cliente realice un mantenimiento adecuado. Por ejemplo:

  • Los paneles solares suelen tener una garantía de producción de 25 años, pero solo si se limpian regularmente.
  • Los inversores tienen una garantía entre 5 y 10 años, y su extensión depende de que las revisiones se hagan conforme al manual.
  • Las baterías de litio requieren que se respeten los ciclos de carga y las temperaturas indicadas.

Un buen programa de mantenimiento no solo previene averías, sino que asegura la validez de las garantías.

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